Hoy, 1 de octubre de 2024 se cumplen 9 meses, ¾ partes, el 75% del primer año de la segunda administración de Federico Gutiérrez en el poder de la Alcaldía de Medellín. Y yo me pregunto ¿Fico ya empezó a gobernar? Yo sí veo un cambio, pero cosmético, en la administración de la ciudad. Se están recogiendo las basuras que el mismo Daniel Quintero dejó de recoger, porque se encargó sólo de aquellas cercanas a él; también se están pintando mobiliarios urbanos que “pinturita” se mecatio en cositas; se están arreglando los jardines que Daniel XX, aupado por Luis XV, creyó que tenía que reforestar desde el Líbano, entre otros hechos que evidencian lo que ya sabíamos, que en el edificio de la Alcaldía podrían poner un cartel que diga “nueva administración”.

Sin embargo, quienes hemos vivido la ciudad con intensidad desde hace unas décadas, quienes la hemos estudiado desde el pregrado hasta el doctorado, quienes la hemos trabajado con las comunidades de base y hasta con la base del empresariado, quienes amamos profundamente a Medellín nos preguntamos, después de 9 meses de gestión: Fico ¿cuándo vas a empezar a gobernar pues?

El fin de semana, el abogado Sergio Mesa (@sermeca en X), publicó una historia que vivió al recorrer la calle 10 de El Poblado, el parque Lleras y lugares aledaños:

“Comenzamos a subir y en los andenes, combinados entre los porteros de las cantinas y discotecas que buscaban atraer nuestra atención y las indígenas con sus niños mendigando una moneda, mientras la Policía sólo les hace recoger sus cartones, comenzamos a ver jovencitas, entre los 15 y 30 años —no aparentaban más—, vestidas de forma muy sugestiva que subían o bajaban, otras estaban estacionadas u otras se hacían en grupos” (https://x.com/sermeca/status/1840026775893450890).

Este es sólo el segundo de nueve párrafos en los que Mesa describe una situación que yo también viví una semana atrás. Esa experiencia de caminar por la calle 10, el parque Lleras y Provenza (un par de días después que 2 jóvenes fueron expulsados por no cumplir los códigos de indumentaria impuestos por la seguridad privada de la zona), me hizo sentir en cualquier parte menos en la Medellín en la que viví hace unos años, que estudié desde Brasil, que trabajé desde la militancia política y en el ejercicio de lo público y que, felizmente, con todas sus contradicciones, he vuelto a sentir viviendo aquí.

Comparto la publicación de Mesa, que además de bien escrita, refleja, a partir de un hecho y un sitio particular, pero bastante representativo, de la ciudad, la pregunta que nos hacemos muchos: Fico ¿ya empezaste a gobernar? Recuerdo que entre los primeros discursos y decretos, que al parecer se quedaron sólo en eso, en palabras, de esas que se perciben inocuas cuando desde el poder no se convierten en “acciones” de verdad, se hablaba de erradicar la prostitución infantil e incluso el consumo de sustancias psicoactivas en el espacio público. Sin embargo, después de hacer un recorrido similar al que hizo Mesa en El Poblado es posible observar que tanto la prostitución infantil como la comercialización y consumo de todo tipo de sustancias psicoactivas son prácticas que siguen vigentes en uno de los espacios más iconicos de la ciudad, y que al parecer siguen siendo los principales motivos para los extranjeros venir a Medellín.

Fico, sé que vos no sos muy amigo de la crítica, pero si lees la publicación de Sergio y las varias columnas que he escrito este año sobre tu administración, vas a encontrar críticas respetuosas en su forma y constructivas en su contenido. Las críticas no se hacen a quien no puede hacer nada para cambiar una situación, por el contrario, las críticas se hacen porque sabemos que vos podes ser mejor gobernante y que estás rodeado de personas idóneas para hacer mejor las cosas.

Por eso te pregunto, para terminar, Fico ¿pa’ cuándo pues? ¿cuándo vas a empezar a gobernar la ciudad? Como te decía en una columna anterior, yo no logro identificar lo qué querés hacer con Medellín, ni en el plan de desarrollo, ni en tu discurso, ni en el de tus funcionarios, ni en los programas; o tal vez, desde las comunicaciones de la Alcaldía no han sido muy efectivos en ese sentido.

Para terminar, y para que veás que la crítica es constructiva, te propongo tres temas, no más, que después de conversar con alguien que desde su trabajo conoce muy bien los problemas de la administración pública de la ciudad, creo que son aquellos en los que te deberías concentrar: 1) seguridad y control territorial (lo que ocurre en El Poblado evidencia esa necesidad); 2) hábitat: oferta de vivienda (¿cuál es el déficit que dejó la “administración” anterior y cuál es la meta de esta?); y 3) movilidad (Medellín ya no es la ciudad de los 15 minutos, sino de los 30 minutos para hacer cualquier recorrido. Desde algunos puntos de la ciudad se llega más rápido a los municipios del oriente que a algunos barrios u otros municipios del Valle de Aburrá).

Ojalá que en tres meses, al final del primer año de gobierno, no haya que preguntar Fico ¿pa’ cuándo pues?, sino que podamos afirmar: Fico ya empezó a gobernar, y dejó el retrovisor atrás. Me comprometo a escribir esa columna, si hay evidencias para hacerla, porque la crítica no es destructiva, sólo busca contribuir a la construcción colectiva de la ciudad.

Otros escritos de este autor: https://noapto.co/juan-felipe-suescun/