Escuchar artículo
|
Enfrentar la crisis climática y los múltiples problemas sociales, requiere de acciones concretas y valientes, encaminadas por la esperanza de que el mundo puede ser mejor; no es una cuestión de idealizar y tampoco de conformarse con lo que hay.
Hace falta cambiar la perspectiva con la que vemos al mundo y a los problemas que identificamos, pues la percepción se queda en que los problemas son de otros, las soluciones no nos corresponden, y en que no hay mucho qué hacer, porque igual hay tantas distracciones y estímulos en el día a día que ni siquiera queda tiempo para ver esa realidad de frente.
Sin embargo, creo que todos tenemos preocupaciones y miedos reales sobre lo que estamos viviendo, pero que muchas veces no terminamos de entender o no vemos la conexión que tienen con la vida diaria. Así que, en principio, algo fundamental es poder nombrar esas preocupaciones y darles el lugar que se merecen, en vez de huir de ellas. Así comienzan a tomar forma, que si bien va a ser aterradora, es el primer paso para buscarles una solución y ver cómo nuestras acciones pueden tener algún impacto. Y aquí no solo hablo de esos miedos y preocupaciones a nivel humanidad, sino también a nivel individual, que para muchos parecieran no ser demasiados, pues las afectaciones todavía no tienen una influencia tan directa, pero que de cierta manera vemos esa amenaza por encima.
Si no comenzamos a hacer ese cambio de perspectiva, vamos a seguir viviendo adormecidos y entumecidos bajo la premisa de que no es tan grave. Con esto no quiero despertar alarmismo o pánico, sino plantear que eso nos impide ver la realidad como es y nos deja bajo la influencia de unos pocos que creen que tienen la última palabra.
Otros escritos de este autor: https://noapto.co/esteban-perez/