Escuchar artículo
|
“En la imposibilidad absoluta de imaginar que un día las mujeres pudieran decidir abortar libremente. Y, como de costumbre, era imposible determinar si el aborto estaba prohibido porque estaba mal, o si estaba mal porque estaba prohibido”
El acontecimiento. Annie Ernaux
Annie Ernaux nació en Francia en 1944. En 2022 recibió el Premio Nobel de Literatura y, al recibirlo, dijo: “Cuando lo indecible sale a la luz, es político”. En sus libros hace el ejercicio literario de narrar su historia y la de su familia con una marca recurrente que menciona en el discurso: se reconoce como una tránsfuga social.
Elige escribir en primera persona y lo hace con tal destreza que logra, como lo dice en el discurso, que ese “Yo sea, en definitiva, transpersonal, que lo singular alcance lo universal”. Las historias de Annie, en la Francia de la posguerra, es también la historia de hombres y mujeres de hoy. Leerla es volver al pueblo, al barrio de la niñez. Es encontrar en sus papás los rasgos de los propios. Esa voz en primera persona logra ser la voz de cualquiera de nosotras.
En El lugar cuenta cómo ella fue la primera de su familia que encontró en el estudio el camino para el ascenso social. Y decir “ella” es decir doble dificultad: mujer y pobre. Este tránsito es determinante en la obra. Sus papás lograron mejorar sus condiciones económicas por la vía del trabajo, el ahorro y el comercio. Ella, que recibe de la madre el lenguaje y la lectura, muy pronto se da cuenta de que ahora el salto dependerá de sus esfuerzos académicos.
La vida universitaria la dota de un nuevo estatus. Entonces, aparece la tensión de seguir siendo parte “de su raza” y al mismo tiempo volverse otra persona, educada, citadina… Cambia incluso la manera de usar ese lenguaje materno y se inscribe en lo que entonces era una forma más culta de expresarse, lo que poco a poco amplía la brecha con su padre. Se da cuenta de que la posición lograda le permite volver al origen para narrarlo.
En El acontecimiento, con detalle y con honestidad, demuestra cómo para las mujeres esa migración social es más ardua y cómo, incluso, genera tantas sospechas. Se detiene en la descripción de las relaciones de poder y de dominación. Insiste: ser mujer de origen pobre será equivalente a ser menospreciada.
Escribe lo que pasó en su vida en 1963 pero uno la lee como si fuera una crónica que acaba de pasar hace un día. Es absolutamente vigente. El desgarrador acontecimiento sucede en soledad, en pobreza y, sin embargo, lo que brilla en ese escenario es su determinación. No hay duda en la decisión.
Supo entonces, como lo sabemos hoy, que el aborto está determinado por la clase social. Las mujeres con posibilidades económicas pueden tomar decisiones sobre sus cuerpos, sus embarazos y sus maternidades que son radicalmente distintas a las decisiones de mujeres pobres.
Annie Ernaux dijo en 2022 al recibir el Nobel: “Si remonto sobre la promesa que hice a los veinte años de vengar a mi raza, no puedo decir si la he cumplido. Es de ella, de mis antepasados, hombres y mujeres empeñados en tareas que les hicieron morir demasiado pronto, de donde recibí fuerza y rabia suficientes para tener el deseo y la ambición de hacerles un lugar en la literatura (…). Inscribir mi voz de mujer y de tránsfuga social en lo que ha sido siempre un lugar de emancipación, la literatura.”.
En 2024 Francia consagró en su Constitución el derecho al aborto.
Otros escritos de esta autora:
https://noapto.co/maria-antonia-rincon/