Escuchar artículo

De idiotas no nos bajaban a los que advertíamos del “castrochavismo” del presidente. Nos mandaban a leer, a informarnos mejor, escribían pretenciosas tesis de ciencia política rechazando la veracidad y profundidad del concepto, o a lo sumo lo desacreditaban con alguna alusión negativa a Uribe. ¡Que sopapo les está dando el tiempo!

El mandatario más visitado por Petro es Nicolás Maduro, y son frecuentes los encuentros bastante cordiales entre ambos gobernantes. Ahora, nuestro presidente se despacha  en X  defendiendo al gobierno cubano y a la familia Castro. Pero no son solo elogios; la política internacional de Colombia aboga por retirarle las sanciones a estas dictaduras.

No pasó ni una semana de la visita de Petro a Chile, en que fue a conmemorar el legado del inflacionista Allende y aprovechó para criticar duramente la dictadura de Pinochet; en cuestión de horas pasó a la defensa de la dictadura cubana. Enérgico para condenar una dictadura que pasó hace años, e igual de animado para defender una que aún sigue oprimiendo a las personas. ¿Entonces las dictaduras de izquierda sí son buenas?

No es solo la hipocresía de condenar dictaduras que ya no existen mientras apoya tiranías que aún perduran, también es el descaro a la hora de hablar del amor del pueblo. Es que si tan benevolentes han sido los Castro con el pueblo cubano ¿Cuál es el miedo a que ese pueblo ratifique en las urnas tanto amor que supuestamente les tienen? ¿Cuál es el temor a que la gente pueda expresar sus pensamientos en medios de comunicación o redes sociales?

La cereza del pastel es ver cómo el petrismo le achaca el fracaso de Venezuela y Cuba a las sanciones económicas. La disculpa allá es que no pueden comerciar con Estados Unidos, pero dicen que a nuestra economía le va mal por tener un TLC con ese país y comerciar tanto con ellos ¿Al fin qué? ¿El problema es comerciar o no hacerlo?

Pueden inventar todas las maromas argumentativas para defender esos dos regímenes totalitarios, pero hay algo que no pueden ocultar: así como en las investigaciones se sigue el rastro del dinero para dar con la verdad, aquí basta ver para dónde huyen las personas para determinar qué tan paradisiaca o no es una de esas dictaduras.

Otros escritos de este autor: https://noapto.co/jose-valencia/

2.9/5 - (7 votos)

Compartir

Te podría interesar