Cada año, durante el mes de junio, la comunidad LGBTQIA+ celebra el Mes del orgullo para conmemorar los disturbios de Stonewall (Nueva York, Estados Unidos) de 1969 que marcaron el inicio del movimiento de liberación homosexual y también para crear conciencia política y social sobre los problemas actuales que enfrenta la comunidad.

A propósito entonces de esta celebración, hoy quiero resaltar las acciones de diversidad, equidad e inclusión que viene desarrollando el sector financiero colombiano como estrategia sostenible. Estas acciones entienden la diversidad, equidad e inclusión en un sentido más amplió que no sólo abarcan a la población LGBTQIA+ sino también a todos los grupos poblacionales subatendidos (mujeres, grupos étnicos, personas con discapacidad, migrantes, reinsertados, jóvenes y adultos mayores).

El sector financiero reconoce que la uniformidad, inequidad y exclusión frenan la contribución que todos los actores sociales pueden hacer al sistema socioeconómico, creando así barreras que impiden el desarrollo sostenible. Es por esto que reducir las desigualdades en el acceso de oportunidades, suscitando la diversidad y la inclusión de grupos poblacionales subrepresentados y en condición de vulnerabilidad es clave para alcanzar un mayor desarrollo sostenible de la economía.

Como resultado, hoy las entidades financieras están encontrando que la diversidad, equidad e inclusión deben ser parte de sus estrategias de sostenibilidad bajo un enfoque integral ASG (Ambiental, Social y de Gobernanza), tanto desde su cultura interna como desde su oferta de valor.

De hecho, Bancolombia fue uno de los primeros bancos colombianos en hablar abiertamente de la necesidad de reconocer la diversidad, y lo hizo hace 5 años, cuando en abril 2017 lanzó una campaña publicitaria llamada “Es el Momento de Todos”. La campaña constaba de varias piezas visuales, entre las que se incluía una en alusión a la inclusión de las nuevas familias, en la que aparecía una pareja de hombres con un perro. Obviamente, el debate fue tal, que incluso grupos de conservadores amenazaron con retirar sus cuentas del banco, pues argumentaban que esta no es la imagen de una familia.

Afortunadamente Bancolombia defendió su estrategia y no se atemorizó por las amenazas de algunos de retirar su portafolio de la entidad. De hecho, hoy, 5 años después, quienes durante este mes pasemos en las noches por el imponente edificio de la Dirección General de Bancolombia en la ciudad de Medellín, veremos al edificio iluminado con la bandera del orgullo gay, lo cual es una clara acción afirmativa del reconocimiento de la diversidad.

Hoy en el escenario global vemos incluso instituciones financieras dedicadas exclusivamente a atender las necesidades financieras de la población LGBTQIA+. Tal es el caso de Superbia Credit Union, una entidad financiera que nació en Michigan en 2019, bajo el entendimiento de la exclusión financiera homosexual en Estados Unidos, sustentada en hechos como que las parejas homosexuales tienen 73% de más probabilidad de ser rechazadas para un crédito hipotecario, en comparación a una pareja heterosexual. Y esos a quienes les aprueban el crédito les asignan una tasa de interés más alta, aunque tienen menor probabilidad de quedar en mora en sus créditos.

Por estas razones, para abordar la equidad es ineludible partir de la diversidad con la intención de lograr la inclusión como punto de llegada, creando estrategias integrales que promuevan la diversidad, equidad e inclusión de manera holística, contribuyendo así al cierre de brechas.