Alejo. Hoy es un gran día: tenemos la posibilidad de empezar a recorrer el camino de la unión de Colombia con el apoyo de todos los que saldrán a votar por vos en la consulta de centro. Es un reto enorme para el que estás preparado y en el que te acompañaremos todos los que desde el inicio creímos en tu inteligencia y en tu integridad.
Caro. Creo que ninguno de los que apoyamos a Alejandro podemos negar que nuestra convicción por él y sus ideas reside en gran parte en todo lo que te admiramos a vos. Has dejado la piel en este sueño y has sido la guía en los momentos clave. Necesitamos esa luz para lo que sigue.
Caro y Alejo ¡Gracias!
Gracias porque entendieron la situación por la que pasa el país y no se quedaron desde la barrera mirando lo que sucedía sino que, basados en esa ética de la responsabilidad de la que tanto habla Alejandro, han asumido su papel de líderes y enfrentado el momento con la valentía y el coraje necesarios para convocar a todos los que hoy vemos en ustedes dos personas con las que a nuestro país le irá bien.
Gracias porque han soportado, desde todos los sectores, ataques sin sentido de una manera tranquila, sin caer en la lógica del llamado a la rabia, al miedo o a la indignación paralizante.
Gracias por defender la libertad y la dignidad del ser humano. Por su defensa de la vida y por su respeto a la democracia.
Gracias por el amor que se tienen entre sí, que nos inspira y nos permite creer que esa fuerza que emana de éste transforma el mundo.
Caro y Alejo. Hoy es un gran día. Sigue el sueño de construir el futuro que Colombia espera, merece y necesita. Cuenten conmigo y con todos los que se han ido sumando en estos meses de tristezas y alegrías, decepción y entusiasmo, risa, llanto, cansancio y energía. Porque la política se hace con el corazón palpitando, la razón comprendiendo y la verdad como bandera.
¡Vamos con toda, vamos a ganar!
Los quiero, Daniel