Los paisas creen que son el ombligo político del país y que, por esto, el país se comporta políticamente igual que ellos. La semana anterior, el Instituto de Ciencia Política Hernán Echavarría Olózaga y la firma encuestadora YanHaas publicaron los resultados de  “Sabemos”, un estudio que busca conocer la opinión ciudadana sobre algunos temas de interés coyuntural. Reconozco y valoro esta iniciativa, una “plataforma pública” que contribuye a la construcción de ciudadanía, de líderes, de académicos, de servidores públicos, de políticos, entre otros actores. Además, es muy importante el esfuerzo financiero que implica tratar de ser consistentes en el tiempo con la presentación de esta información, como lo han hecho rigurosamente en los últimos tres meses, presentando los resultados correspondientes a julio, agosto y septiembre de 2024.

En la más reciente encuesta, frente a la pregunta “Independiente de su posición política, ¿Usted aprueba o desaprueba la forma como Gustavo Petro está conduciendo su Gobierno?”, los resultados a nivel nacional fueron los siguientes: Aprueba = 30%; No aprueba, Ni desaprueba = 18%; Desaprueba = 50%. En la medición del mes de julio, los resultados habían sido 30%, 19%, 49%, respectivamente, y en agosto fueron 29%, 20%, 49%, muy similares a la de septiembre.

Ahora bien, una lectura de estos resultados en las cuatro ciudades principales muestra unas diferencias interesantes. Bogotá es la ciudad cuyos resultados más se aproximan al promedio nacional (29%, 17% y 52%). Cali es la capital donde Petro obtiene los mejores resultados (44%, 22% y 32%), seguida de Barranquilla (38%, 18% y 44%). Y Medellín, “bastión de la oposición”, es la ciudad donde el presidente obtiene los peores resultados, apenas el 19% lo aprueba, el 17% ni lo aprueba, ni lo desaprueba, y el 62% lo desaprueba.

Estos datos son consistentes con los mostrados por otras empresas encuestadoras en los últimos meses con relación a la gestión del gobierno de Gustavo Petro. En general, en todo el país lo desaprueba más de la mitad de la población (50%), hay un 20% aproximadamente de personas que ni lo aprueba, ni lo desaprueba, y la aceptación del presidente gira alrededor del 30%.

Pero en Medellín y en Antioquia las cosas son diferentes. Según el estudio Sabemos, la desaprobación de Petro ha sido: 57% en julio, 58% en agosto y 62% en septiembre, con una clara tendencia ascendente. La no aprobación, ni desaprobación, se ha ubicado así: 16%, 24% y 17%, respectivamente. Y la aprobación: 22%, 17% y 19%. Es decir, en términos generales, aquí, el 60% lo desaprueba; el 20% ni lo aprueba, ni lo desaprueba; y el 20% lo aprueba.

Entonces, en general, en Colombia frente a la misma pregunta, las cifras son: 30%, 20%, 50% y en Antioquia 20%, 20% y 60%. Es decir, aquí hay un 10% menos que aprueba la gestión de Petro; y esa cifra, por el contrario, está en quienes desaprueban al presidente.

Ese 10% representa el ombligo paisa. Es un lugar común, en todo el país, hablar de la identidad regional de los antioqueños. Ese llamado “regionalismo” se expresa de muchas maneras, por ejemplo, mediante el egocentrismo y la autocomplacencia que nos ha hecho creer que Antioquia es el ombligo de Colombia. Pues bien, ese 10% de desaprobación, de más, que tiene Petro en estas tierras, ha hecho pensar a sus gentes que las cosas en el país político se presentan de la misma forma que son aquí. Y no, las cosas no son así. Ahí están las cifras. Si bien las diferencias no son abismales, con relación a la aprobación o desaprobación del gobierno Petro, tampoco son las mismas en Antioquia que en Colombia.

En Antioquia se escucha a las personas, del común, empresarios, jóvenes, etc. hablar de la desaprobación del presidente, pero creo que engrandecen la desaprobación y la generalizan más de lo que en realidad es en el país, y además, vaticinan resultados electorales en el 2026 que si bien son hasta cierto punto predecibles, quizá no sean tan estruendosamente catastróficos para el Pacto Histórico y los intereses de Gustavo Petro como se cree y se espera en estas tierras. El 30% de personas que aprueba el gobierno en todo Colombia representa un buen número de votos, una base electoral más grande que el 10% de antioqueños, de más, que lo desaprueba, y hace pensar que políticamente este departamento es el centro del país.

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