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Si en Medellín hemos tenido cuatro años de terror, no ha sido únicamente por la corrupción, la mezquindad y la ineficiencia de la administración distrital; la culpa también radica en el concejo de la ciudad. De los 21 cabildantes que fueron electos en 2019, menos de la mitad son los que el 31 de diciembre cumplirán con su periodo. La mayoría usaron su curul como trampolín a otros cargos, dejando tirada a la ciudad en los momentos que más los necesitaba El concejo cumple funciones de control político, pero durante estos cuatro años la administración Quintero no encontró en él un real contrapeso, encontró un aliado servil a muchos de sus intereses.
Por mencionar algunas cosas, el concejo le aprobó a Daniel Quintero vigencias futuras, que en una administración tan cuestionada por mal manejo de los recursos es cuando menos una irresponsabilidad. Sin embargo, hay que resaltar la labor de dos concejales que investigaron y vigilaron el actuar del alcalde y sus secretarios: Alfredo Ramos y Daniel Duque. Medellín no puede repetir la historia, el próximo 29 de octubre tenemos la oportunidad de elegir a personas serias, competentes y que trabajen de cara a la ciudadanía, no aduladores o notarios de la administración de turno. Aquí van algunas recomendaciones.
Empiezo por hablar de mi amigo Esteban Jaramillo, él es #1 en la lista de Renace. Esteban estudió derecho en la Universidad de Medellín y tiene un MPA en la Universidad de Nottingham en Inglaterra. Esteban es abogado, profesor, activista y columnista de esta casa. Llegará al concejo con las banderas de sostenibilidad y recuperación de la ética de lo público. Ha formado un equipo ideal: técnico, plural y que lleva a Medellín en la piel, el corazón y la razón. Esteban es un defensor de las libertades individuales, el medio ambiente y los animales, la justicia y el buen gobierno. Una persona de las mejores calidades humanas y profesionales.
Manuela Restrepo aspira al concejo por la lista Renace con el #10, es una mujer valiente y admirable. Ha hecho seguimiento y denuncia de la lamentable situación por la que pasan muchas mujeres gestantes y recién nacidos por el abandono de la administración distrital en este tema. Con ella en el concejo muchas mujeres tendrán la representación que se merecen. En su agenda también están los temas de género, emprendimiento y turismo responsable que enfrenta la gentrificación y la explotación sexual.
Juliana Hernández está aspirando con el #3 del Centro Democrático. Es empresaria del sector agropecuario y activista política. Quiere llegar al concejo para defender la cultura ciudadana, la recuperación de la confianza en lo público y la eficiencia en el gasto. En su agenda es primordial el tema de primera infancia, que durante estos cuatro años afrontó una situación crítica.
Estos son mis recomendados para que el lector guíe su decisión e indague más sobre sus propuestas. Sin duda hay otros candidatos con los que el Concejo de Medellín quedaría en las mejores manos. El próximo concejo tiene la misión de recupera la confianza ciudadana, continuar la discusión sobre la venta o no de la participación en Tigo-Une, discutir un nuevo POT, la entrada en pleno funcionamiento de Hidroituango, el plan decenal de cultura y la discusión de un plan de desarrollo para un cuatrienio en el que la ciudad deberá sobreponerse al desastre Quintero y proyectar un nuevo modelo de ciudad para el fututo. El reto es grande.
Otros escritos de este autor: https://noapto.co/samuel-machado/
